Entre los nuevos cargos en contra de la pareja están conspiración, obstrucción a la justicia, actuación de un funcionario público como agente extranjero, soborno, extorsión y fraude electrónico
El senador Bob Menéndez y su esposa, Nadine Menéndez, fueron acusados de obstrucción a la justicia en una nueva acusación de 18 cargos que se hizo pública este martes y que se suma a los cargos de corrupción a los que ya se enfrenta el demócrata de Nueva Jersey.
Entre los nuevos cargos en contra de la pareja están conspiración, obstrucción a la justicia, actuación de un funcionario público como agente extranjero, soborno, extorsión y fraude electrónico. Los nuevos cargos figuran en una acusación redactada de nuevo contra el demócrata en una corte federal de Manhattan.
El Departamento de Justicia presentó en septiembre del año pasado tres cargos de corrupción contra Menéndez vinculados a un presunto plan de soborno a cambio de usar su poder político como senador para ayudar a los gobiernos de Egipto y Catar, y a tres empresarios de Nueva Jersey.
La acusación anterior alega que la pareja conspiró con los empresarios para aceptar los sobornos a cambio de la ayuda del senador en proyectos perseguidos por los empresarios. La pareja se ha declarado inocente, junto con dos de los empresarios. El juicio está previsto para mayo.
Otro empresario, José Uribe, involucrado en el caso se declaró culpable de los cargos la semana pasada y aceptó testificar en el juicio contra los demás.
Uribe, excorredor de seguros, había sido acusado de proporcionarle a la esposa del senador, Nadine Menéndez, un Mercedes-Benz a cambio de los esfuerzos del político demócrata para interceder a su favor en una investigación de fraude de seguros en Nueva Jersey.
Tras su detención en otoño, Menéndez, de 70 años, se vio obligado a renunciar a la presidencia de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, pero dijo que no dimitiría del Congreso.
De acuerdo con la acusación entre los sobornos que Menéndez y su esposa recibieron se encuentran también lingotes de oro y dinero en efectivo.
Menéndez se declaró inocente de los cargos anteriores de aceptar cientos de miles de dólares de empresarios para obstaculizar las investigaciones policiales a las que se enfrentaban y de actuar ilegalmente como agente del gobierno egipcio.