Venezuela denunció ante la comunidad internacional que las autoridades de Estados Unidos, en una práctica criminal reincidente, confiscaron una vez más ilegalmente un avión utilizado por el presidente de la República.
A través de un comunicado oficial, el Gobierno bolivariano destacó que Estados Unidos justificó la incautación de la aeronave presidencial con «las medidas coercitivas que de manera unilateral e ilegal impone alrededor del mundo».
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De acuerdo con la declaración, «esta acción revela que ningún Estado y ningún gobierno constitucional está a salvo de acciones ilegales que desconocen el derecho internacional».
Al respecto, indicó que Washington utiliza su poderío económico y militar para amedrentar y presionar a Estados como el de República Dominicana para que sirvan de cómplices en sus actos.
Por último, el Gobierno bolivariano alertó que se reserva el derecho de emprender cualquier acción legal para reparar el daño perpetrado contra el país tras el robo de la aeronave.
Como muestra de rechazo a la «ilegal y fraudulenta confiscación del avión presidencial», el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, consideró este «acto de piratería» como una violación del Derecho Internacional por parte del gobierno de Estados Unidos.
Mediante una publicación en la plataforma X, el ministro de Relaciones Exteriores denunció la impunidad de ese país para cometer estas acciones «bajo justificación de arbitrarias medidas coercitivas unilaterales».
Condenamos ilegal y fraudulenta confiscación de avión presidencial de #Venezuela
Este acto de piratería es violación de Derecho Internacional por parte gobierno EEUU, que usa impunidad para cometer estas acciones bajo justificación de arbitrarias medidas coercitivas unilaterales pic.twitter.com/w0G5wdCIfV
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 2, 2024